Code Pink – Open letter: Solidarity with Russian anti-war protestors
Carta abierta: Solidaridad con los protestantes antibelicistas rusos – por Code Pink
Code Pink – Open letter: Solidarity with Russian anti-war protestors
Source credit for this open letter: Code Pink
”Add your name to the open letter from women, and other feminists (including men), in solidarity with Russian anti-war protestors.
Dear Russian anti-war protestors,
We, women and other feminists (including men) of the world, express our solidarity with you as you protest the devastating invasion of Ukraine, and we join your call for Russian troops to immediately leave Ukraine. We are aware of the risks you face from police and civil authorities and thank you for your profound bravery and sacrifice. We are also moved by the tremendous courage of the Ukrainian people in the face of disaster, and our hearts ache as we bear witness to Ukrainian families huddling in bomb shelters and parking garages, or facing long lines at the border after being forced to flee their homes.
We have experience standing up to our own governments’ aggression. During the U.S./NATO invasion and occupation of Iraq and Afghanistan, we took to the streets by the hundreds of thousands to oppose the horrific destruction of entire cities and the death of hundreds of thousands of innocent people. Now, as Russian missiles mercilessly wipe out your neighbors’ homes, medical facilities, and schools in Ukraine, we see you take to the streets of Moscow, St. Petersburg, and other Russian cities in peaceful protest, and we are so deeply inspired and grateful.
As we oppose this brutal war being waged in your name, we are also aware of the role the U.S. and NATO have played in stoking the geopolitical crisisthat led to this war. We have opposed NATO’s expansion into Central and Eastern Europe, and we continue to oppose NATO expansion today. We steadfastly believe Ukraine should be a neutral country.
Today, as Putin has put your nuclear arsenal on high alert, we see the terrifying possibility of this conflict spinning out of control. The U.S. and Russia are guilty of stockpiling 90% of the world’s nuclear weapons, putting the entire world at risk, and violating the Nuclear Nonproliferation Treaty. As we organize today to stop this war, we must work together in the future to force our governments to join the UN Treaty on the Prohibition of Nuclear Weapons so we can rid the world of this existential threat to survival on our beautiful planet.
The imposition of sanctions aimed to damage the Russian economy also concerns us. We have no problem with taking yachts and private jets from oligarchs, but sanctions that hurt millions of ordinary Russians like you and impact the entire global economy are cruel and counterproductive. We have seen the devastating results of sanctions in countries from Cuba to Iran to North Korea–such sanctions harm the civilian population, particularly women, children, and the elderly, and fail to change government policies.
Instead of indiscriminate sanctions and fanning the flames by pouring more weapons into Ukraine, we demand that Russia and Ukraine engage in serious negotiations, with all the compromises this would entail.
As women and other feminists, we have had enough of senseless wars that destroy lives and communities while lining the coffers of weapons manufacturers. We’ve seen too many attacks on civilians from Yemen to Gaza to Ethiopia to Ukraine, and we’ve watched in horror as precious resources are poured into wars while families’ basic needs for food, shelter, education, and healthcare go unmet and climate change threatens all life on our planet. A world of violence, hatred, and destruction is not the world we want for our children. With fire in our bellies and love in our hearts, we join with you — across borders — to demand an end to the bloodshed and the destruction.
Russian Troops Out of Ukraine!
Ceasefire Now!
No NATO expansion!
Peace Talks NOW!
Carta abierta: Solidaridad con los protestantes antibelicistas rusos
Agrega tu nombre a la carta abierta de mujeres y otras feministas (incluyendo hombres), en solidaridad con los protestantes antibelicistas rusos.
Queridos protestantes antibelicistas rusos,
Nosotras, las mujeres y otras feministas (incluyendo hombres) del mundo, expresamos nuestra solidaridad con ustedes mientras protestan contra la devastadora invasión de Ucrania, y nos unimos a su llamado para que las tropas rusas inmediatamente abandonen Ucrania. Estamos conscientes de los riesgos que ustedes corren ante la policía y las autoridades civiles y les agradecemos por su valor y sacrificio extraordinarios. También estamos conmovidos por el enorme valor de los ucranianos ante el desastre, y nuestros corazones se duelen al presenciar a las familias ucranianas aglomeradas en refugios contra bombas y en garajes, o haciendo largas filas en la frontera tras haber sido forzados a abandonar sus hogares.
Tenemos experiencia en alzarnos contra la agresión de nuestros propios gobiernos. Durante la invasión y la ocupación de Iraq y de Afganistán por EE.UU. y la OTAN, salimos a las calles por cientos de miles para oponernos a la horrible destrucción de ciudades enteras y a la muerte de centenares de miles de personas inocentes. Ahora, mientras los misiles rusos barren sin piedad los hogares, las instalaciones médicas y las escuelas de sus vecinos en Ucrania, los vemos tomar las calles de Moscú, de San Petersburgo y otras ciudades rusas en protesta pacífica, y estamos profundamente alentados y agradecidos.
Igual que nos oponemos a esta guerra brutal emprendida a nombre de ustedes, estamos también conscientes del papel que los Estados Unidos y la OTAN han jugado en la incentivación de la crisis geopolítica que ha conducido a esta guerra. Nos hemos opuesto a la extensión de la OTAN a Europa Central y Oriental, y nos seguimos oponiendo a la extensión de la OTAN hoy. Creemos firmemente que Ucrania debe ser un país neutral.
Hoy, cuando Putin ha puesto su arsenal nuclear en máxima alerta, vemos la aterrorizante posibilidad de que este conflicto remonte fuera de control. Los Estados Unidos y Rusia son culpables del almacenamiento del 90% de las armas nucleares del mundo, poniendo en riesgo a todo el planeta y violando el Tratado de No Proliferación Nuclear. Mientras nos organizamos hoy para detener esta guerra, debemos trabajar juntos en el futuro para forzar a nuestros gobiernos a unirse al Tratado de Prohibición de Armas Nucleares de la O.N.U., de modo que podamos librar al mundo de esta amenaza a la supervivencia en nuestro hermoso planeta.
La imposición de sanciones dirigidas a dañar la economía rusa también nos preocupa. No tenemos ninguna objeción a que se incaute yates y jets privados a los oligarcas, pero las sanciones que dañan a millones de rusos comunes como ustedes y afectan toda la economía global son crueles e ineficaces. Hemos visto los devastadores resultados de sanciones en países desde Cuba e Irán a Corea del Norte. Tales sanciones afectan a la población civil, particularmente a mujeres, niños, y ancianos, y fracasan en cambiar las políticas del gobierno.
En lugar de sanciones indiscriminadas y de avivar las llamas vertiendo más armas en Ucrania, exigimos que Rusia y Ucrania se involucren en negociaciones serias, con todos los compromisos que esto implicaría.
Como mujeres y feministas, hemos tenido suficientes guerras sin sentido que destruyen vidas y comunidades mientras llenan las arcas de los fabricantes de armas. Hemos visto también demasiados ataques contra civiles desde Yemen a Gaza, de Etiopía a Ucrania, y hemos presenciado con horror cómo valiosos recursos se vierten en guerras mientras que las necesidades básicas de alimento, vivienda, educación y asistencia médica de las familias se incumplen y el cambio climático amenaza a toda la vida en nuestro planeta. Un mundo de violencia, odio, y destrucción no es el mundo que deseamos para nuestros niños. Con fuego en nuestros vientres y amor en nuestros corazones, nos unimos a ustedes — a través de las fronteras — para exigir el fin a la matanza y la destrucción.
¡Tropas rusas fuera de Ucrania!
¡Alto el fuego ahora!
¡Ninguna extensión de la OTAN!
¡Conversaciones de paz AHORA!
¡Gracias por firmar!!
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Fuente de crédito para esta carta abierta: Code Pink
